martes, 23 de marzo de 2010

“Lo único que se veían eran chispas”

Accidente en Luis A. de Herrera y la rambla no deja más que susto en los protagonistas

“Nos pasamos una cuadra” gritó uno, y el conductor se distrajo. “Cuidado la roja”, dijo el mismo que había advertido lo anterior. Un auto que avanzaba por la transversal, más cerca, no llega a darnos… sí llega, nos impactó. Vueltas, chispas, ¿dónde están los ocupantes de ese auto? La distracción de un conductor cambió la perspectiva que hasta entonces tenía de sí mismo Ignacio Tejedor quien se vio a sí mismo cubriendo un evento periodístico, pero esa vez los protagonistas no eran otros, era él.


-¿En dónde fue?
En la intersección entre Luis Alberto de Herrera y la rambla Armenia. Nosotros viajábamos en un Chevrolet Corsa que termina impactando contra un auto de la misma marca pero Spark.

-¿Manejaba usted el vehículo?
No, un amigo.

-¿Qué pasó?
Imprudencia, distracción o un simple `boludeo´ del conductor. Veníamos por Luis Alberto de Herrera y no veníamos rápido. “Nos pasamos una cuadra” gritó uno de nosotros y creo que fue ahí cuando el conductor se distrajo. El mismo que gritó que nos pasamos una cuadra fue el que dijo cuidado la roja. Fue terminar de decir eso que vemos al Spark venir hacia nosotros a gran velocidad. Nosotros frenamos pero el Spark mantuvo su velocidad (que por cierto era rápida). Obviamente, que acá los únicos culpables fuimos nosotros al saltearnos la luz roja.

-¿Cómo fue el momento del impacto?
Cuando veo venir al Spark pensé que no lo íbamos a impactar, apenas tocamos la parte trasera del Spark. Pero cuando lo hicimos, el auto de ellos comenzó a girar y en un momento vuelca y queda derrapando, boca abajo. Lo único que se veía eran las chispas que sacaba el Chevrolet. En eso, comenzó a salir algo por la ventana del lado del acompañante, pensamos lo peor, temíamos que aquello fuera una persona… Por suerte era un chaleco que traía la señora acompañante.

-¿Cuál fue la reacción inmediata de ustedes?
Estacionamos el auto detrás de un contenedor de basura. Nadie habló por varios segundos. Quien rompió el hielo fue el propio conductor quien no podía creer el error que había cometido y nos pedía constantemente perdón por lo sucedido. Nosotros tratábamos de transmitirle tranquilidad, pero por dentro creo que todos estábamos nerviosos…

-¿Estaban nerviosos por el accidente o porque no sabían el estado de los ocupantes del otro vehículo?
Por lo segundo. Cuando bajamos del auto, nuestro amigo (quien conducía), enseguida llamó al 911. Pero luego, él quería ir a ver cómo había quedado el otro vehículo. Nosotros se lo impedimos, previendo cualquier reacción del conductor del Spark o que nuestro amigo se encuentre con una imagen desagradable. Entonces uno de nosotros, que no fui yo, se arrimó hasta el lugar.

-¿Qué vio?
La pareja damnificada estaba bien, asustada obviamente. Mucha gente se había amontonado cerca del otro auto. El chofer estaba un poco raspado, eufórico y enojado. La mujer que lo acompañaba trató de tranquilizarlo en todo momento, incluso fue la que hizo que no se acercara a nosotros para que no ocurra ningún tipo de discusión. Había más curiosos que gente con predisposición a ayudar. Salvo una pareja que resultó de mucha ayuda para nosotros.

-¿Qué ayuda les brindó esta pareja?
La pareja nos aconsejó en todo momento. Nos sentíamos un poco desamparados dada la circunstancia y el momento en el que estábamos (ninguno de nosotros había protagonizado un accidente), ellos oficializaron como la figura paterna que nos faltaba. Nos dijeron lo que teníamos que hacer y también nos aconsejaron en todo momento.

-¿Y la Policía como se portó con ustedes?
No ayudó mucho. Solo les pidió los datos a los conductores, pero a nuestro amigo el policía lo “sobró” en algunos momentos con un tono en la pregunta que no hacía a la causa. Nos sorprendió que no le hayan hecho espirometría a los conductores, nosotros le pedimos que haga pero la contestación de ellos fue que sólo se hace en aquellos accidentes en los que hay heridos. Nos sorprendió.

-¿Cómo califican el desempeño de la Policía?
Nosotros no somos quien para calificarla, pero hay que reconocer que se comportaron de manera extraña. Siempre riéndose entre ellos y con el conductor del Spark (que no estaba del todo sobrio). Nosotros llegamos a sospechar que el conductor del otro vehículo tenía cierta relación con la Policía, no critico esto sino que no se siga el procedimiento o, por lo menos, que nos traten bien (somos personas que cometimos un error, merecemos ser tratados con respeto).

-¿Qué enseñanza le dejó este lamentable episodio?
Si hay a alguien que le dejó una enseñanza es a nuestro amigo. Estoy seguro que será más prudente a la hora de conducir y no se distraerá. Soy creyente y creo que hubo una mano de alguien que hizo que nadie resultara lastimado.

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